De viaje con Tendencia Aciditas

Vicente Aguirre Barragán

El virus y el encierro hay que tomarlos con humor. Si el tie-dye llegó para revolucionar los sesentas, declaro que ‘Aciditas’ es su versión avanzada y mejorará el viaje de cualquiera que la consuma.

Rose Lillian es una marca que idea prendas utilizando Ebru, una técnica de teñido sobre superficie líquida llena de pintura viscosa flotando en todas direcciones. Nunca sabremos el patrón exacto obtenido solo que será similar al mármol o piedra volcánica. De ahí la traducción del nombre en inglés “marmoleado en papel.”

Aciditas es ecléctica no solo en colores, busca dar a los materiales que usa muchas vidas como si fueran gatos. Creativos como Maisie agregan parches, solecitos y estrellitas, no se preocupan sobre si los tonos de su ropa combinan. Aciditas no sigue la paleta tonal de los mortales: nos invita a diversificarnos y a nuestro guardarropa después de meses monótonos.

Pero hasta en los arcoíris hay lados oscuros. La facilidad para crear productos alegres con técnicas que imitan el “hazlo tú mismo” ha perjudicado a los aficionados del calzado deportivo o sneakerheads: bots que venden productos falsos a los aficionados son cada vez más normales haciendo de Instagram un nuevo mercado negro disfrazado de arcoíris.

Estamos ante una nueva era psicodélica que ya ha durado más de lo que debería arrimándose cerca a la ropa de calle. Tony Tafuro, Koy and Victoria, Here not There, Barrow agregan varios ceros a los precios Aciditas e italianas que no quieren salir del mapa como Emilio Pucci y Versace.

Koy and Victoria

Hasta los muebles aciditos llenan el vacío de diversión social que ya ansiábamos: Space Available produce fundas de vinilos, tocadiscos, sillas con compartimentos TODO con patrones tripeantes y componentes reciclados mientras Tarta Gelatina cojines hipnóticos en tonos pastel para echarte al disfrutar el renacimiento de lo estrafalario.